Cuando se trata de contratar a wedding planners profesionales, es posible que pienses que no son necesarias o que puedes tú con ayuda de tu dama de honor o familia lograrlo. Sabemos que las bodas son caras: hay que reservar el lugar de la recepción y pagar todo, desde la comida y el alcohol hasta la fotografía y la decoración, por mencionar algunos de los gastos más grandes. Aunque todos estos gastos son necesarios y merecen la pena, es posible que quieras recortar gastos en otras áreas, y contratar sólo a los proveedores más necesarios puede parecer una forma fácil de ajustar tu presupuesto. Un coordinador de bodas, por ejemplo, podría parecer que entraría en la categoría de “deseable de tener, pero no totalmente necesario”, y para algunas parejas, ese es el caso. Para otras, sin embargo, recortar este gasto puede acabar costando más a largo plazo.
Aquí, te explicamos cómo decidir si necesitas o no wedding planners.
Si estás planeando una celebración con muuuuuchos detalles, un wedding planner puede ser tu salvación. Un wedding planner te ayudará a mantener en orden hasta el último elemento y se asegurará de que tu plan se ejecute a la perfección. Estadísticamente, las parejas que no contratan coordinadoras de bodas acaban gastando más dinero, tiempo y energía que las que sí lo hacen. Recuerda, lo último que deberías hacer la mañana de tu boda es organizar todos los detalles de última hora ¿verdad?
No hay dos bodas iguales, incluso las más sencillas tienen una cierta complejidad y requieren una cuidadosa consideración. En un evento pequeño, si no eres hiper organizada o simplemente no te gusta la idea de gestionar todo un día de evento, contrata a un coordinador. Por otro lado, si eres una genio de la organización y confías en que tu equipo de proveedores puede funcionar por sí solo, probablemente no necesites ayuda profesional.
Es fácil pedirle a un amigo o familiar que te ayude a coordinar tu boda. Pero recuerda que los amigos y la familia pueden no tener la paciencia o el estómago para un trabajo tan estresante y la mayoría de las veces no tienen un “plan B” por si hay algún imprevisto. Además, un amigo o familiar puede resentir el hecho de no poder disfrutar de los beneficios de ser un invitado porque ellos están “trabajando”.
Contratar a wedding planners para que te ayuden con la planificación y las necesidades del día de tu boda tiene muchos beneficios además de la tranquilidad de que tu evento saldrá como lo soñaste. Por ejemplo, en Amore Wedding & Event Planners tenemos una basta red de proveedores que les dan un plus, un apapacho a nuestros clientes. Estamos contigo durante todo el proceso y sabemos las preguntas que hay que hacer a los proveedores en caso de que se te escape un detalle. Además servimos de punto de contacto único, al que pueden acudir si tienen dudas y evitar así evitar triangulaciones. Y por último, y tal vez lo más importante, al contar con nuestra experiencia, ustedes tendrán la confianza de que todo fluirá como lo planearon y tendrán paz mental, que en tiempos de estrés vale más que el oro.
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