Esta pareja nos encantó desde el momento en que decidieron compartir su gran día con nosotros. Radicaban fuera del país, entonces para ellos el tener el control de proveedores era sumamente importante.
Cuando nos contrataron ya contaban con la mayoría de los detalles que incluirían en su boda, buscaban únicamente quién los apoyara durante el evento.
Para nosotros fue un placer enorme trabajar para ellos. Planear una boda a larga distancia no es fácil, sin embargo, pudimos hacer revisión de detalles por FaceTime, correo y algunas citas presenciales en fechas y horarios que se acoplaron al itinerario de los Novios, logrando que desarrolláramos una química padrísima, la cual se reflejó completamente el día del evento.
Nuestra satisfacción más grande, fue ver una boda exactamente como ellos la pidieron y que a pesar de no estar físicamente aquí, pudimos plasmar lo que estuvieron planeando con tanto esmero durante todo el proceso y que vivieran su experiencia de boda al máximo.